La caída de la II República, los tres años de cruenta Guerra Civil y el posterior oscurantismo, han sido para España el golpe más duro de su historia reciente. Dejando de lado el número elevadísimo de víctimas, los más de 120.ooo desaparecidos[1]y los miles de exiliados, si es que se puede dejar de lado todo ello. La victoria del bando nacional, supuso una puñalada mortal en el ámbito cultural, del cual aún no se ha recuperado del todo. En esa España que perdió y en la que algunos tuvieron la suerte de exiliarse se encontraba la flor y nata de la cultura: Picasso, Buñuel, Juan Ramón Jiménez, Falla, Sánchez-Albornoz, Alberti, etc. España anocheció. Como señala J. L. Abellán
“España se permitía el lujo de prescindir de este espléndido plantel de maestros que habían situado a España en un nivel intelectual envidiable, y cuya ausencia iba a convertir a la España de Franco en un yermo cultural”