Este texto, originalmente escrito en inglés y cuya traducción presento a continuación, lleva la firma de Borzou Daragahi, corresponsal en El Cairo para el Financial Times desde 2011, y que lo ha compartido en su perfil de Facebook. El título escogido para la entrada hace referencia a este artículo.
Esta es mi guía para los analistas y periodistas que escriben sobre Siria y que quieren defender a Bashar al-Asad y seguir manteniendo su credibilidad en Occidente:
1. Menciona continuamente al Frente de al-Nusra y otros grupos yihadistas sin mencionar que la gran mayoría de grupos armados no son tan extremistas ni de lejos y que son en su mayoría personas de la zona defendiendo sus ciudades y pueblos.
2. Cuando te refieras a la oposición armada non dejes de usar la palabra mágica: AL-QAEDA.
3. Maldice la brutalidad del regimen (no tendrás credibilidad si no lo haces), pero evita recordar las raíces del conflicto como un movimiento de oposición pacífica a la dictadura de Bashar. Evita hacer mención al uso injustificado de la fuerza aérea contra los civiles en las colas del pan y en sus casas.
4. Habla continuamente de la OTAN, los países del Golfo y el apoyo occidental a la oposición: ello aumentará las credenciales antiimperialistas de Bashar entre los izquierdistas.
5. Céntrate en los errores de la incompetente y desorganizada oposición siria en el exterior en vez de en las redes de activistas y la sociedad civil nacida dentro de las fronteras y que está estableciendo formas de gobierno en el interior.
6. Pinta a Rusia como un broker honesto que intenta resolver el conflicto de forma pacífica en vez de como un vil jugador de ajedrez a quien nada importan los ciudadanos sirios ni las decenas de miles de chechenos asesinados en un intento de aplastar una rebelión en los 90.
7. No dejes de advertir de las consecuencias del colapso del Estado en Siria: Guerra sectaria, refugiados en Europa, advenimiento de un Estado islámico…
8. Saca cada poco tiempo alguno de los escasos ejemplos de mala conducta de los rebeldes o vídeos falsos y preséntalos como si fueran representativos de toda la oposición.
9. Pinta a la oposición como intransigente: ellos son los que no quieren un acuerdo pacífico y no el presidente que hizo reformas durante 10 años y repartió a los shabbiha para asesinar a manifestantes pacíficos cuando hablaron.
10. Reza a Dios (aunque seas ateo) para que los rebeldes no lleguen a Damasco, abran los expedientes y encuentren lo que has hecho por el régimen, los detalles de las conversaciones de cómo conseguiste los visados y cómo lograste acceder a los oficiales.
Naomí Ramírez Díaz